La voz viene y se va, haciendo figuras con el aire, llevándoselo como corbatín, haciéndolo vibrar en espiral y luego en forma de fuente. Es la voz más dulce que he escuchado en mucho tiempo. Me dice "te amo". No sé qué responder. No sé si una voz puede escuchar. No tiene rostro y tampoco se exactamente de donde viene, pero ahí está. Es una voz de mujer, una voz tierna, entrenada para deleitar. Se va aunque no por mucho tiempo. Regresa como terciopelo. Me canta muy de cerca y me recita historias sólo con notas musicales. Es un poema vocal, si acaso existe algo similar. Cuando estoy sentado frente a la computadora viene y me hace recordar asuntos que daba por olvidados. La pequeña voz va pescando recuerdos espesos de cuando tenía dieciocho años. Me tararea la música que escuchaba aquellos días. La voz se convierte en un violín, después en un bandoneón y llora. Música que ya no recordaba, que me hacía sentir triste y ahora feliz. Viene por las noches cuando todo está t...
Un espacio donde pongo todo aquello que escribo bajo el único criterio de relajarme. Encontrarás literatura, opinión o asuntos que no comprenderás, porque ni yo mismo a veces me entiendo.